Mochila portabebés: Beneficios y consejos para comprar una
La mochila portabebés nos permite llevar al bebé de forma cómoda y práctica pero para comprar la adecuada deberemos tener en cuenta cuestiones como que sea ergonómica o los materiales con los que está hecha.
Las mochilas portabebés son accesorios cada vez más utilizados por madres y padres para llevar a sus hijos. Estos accesorios permiten tener a nuestros hijos siempre cerca, pero ¿qué otros beneficios tienen? ¿cómo funcionan exactamente los portabebés? ¿Qué tan seguros son? ¿Qué características deben tener a la hora de elegir un modelo? Intentemos responder todas estas preguntas a continuación.
Mochila portabebés: Beneficios
La mochila portabebés es como su nombre indica, una mochila adaptada para llevar al bebé encima, por lo que ayuda a madres y padres a tener libertad de movimiento, sin renunciar al contacto con el bebé. Gracias a este accesorio, es posible ordenar la casa, cocinar y caminar y tener al bebé bajo control al mismo tiempo.
Podemos pensar así que usar una mochila portabebés tiene muchos beneficios, tanto para el bebé como para los padres.
La ventaja más obvia es lo que acabamos de mencionar, ya que gracias a un accesorio de este tipo, una madre y un padre pueden llevar a su bebé en brazos sin tener las manos ocupadas. Gracias a la mochila portabebés, es posible dar la atención adecuada a tus hijos sin renunciar a las tareas del hogar, las compras o los paseos.
Pero no es solo esto. Una mochila portabebés es ajustable, el respaldo se puede alargar o acortar. Esto significa que se puede usar durante mucho tiempo, siguiendo el crecimiento del niño incluso hasta los dos años.
El uso de esta mochila también ayuda a distribuir mejor el peso del bebé en el cuerpo de mamá y papá y reduce la fatiga de cargar.
Cómo usar un portabebés
Para poder beneficiarte de todo lo dicho, será esencial saber cómo usar la mochila portabebés. Primero, coloca al bebé en el portabebés, asegurándote de que asume una postura que no dañe tu espalda y que sea otorgada por el portabebé que tengas disponible. Luego, pasa a asegurar las correas. Los hombros y la cintura deben estar firmes pero no completamente cerrados. El niño debe estar seguro, pero aún tener libertad de movimiento. Asegúrate de que las correas de los hombros no causen molestias y que estén ajustadas a la altura adecuada, cómodas para ti y para el bebé. El peso debe estar bien distribuido.
Para garantizar una mayor comodidad al niño, puede resultar útil añadir una almohada detrás de la espalda o en el asiento, o montar el reposacabezas. Si tienes la intención de usarlo fuera de casa y hace sol, es posible que necesites un panel que actúe como techo y resguardo del calor.
Las posiciones
Por otro lado, en una mochila portabebés, es posible que el bebé pueda tomar diferentes posiciones. Obviamente, mucho depende del tipo de portabebés que compres, dado que no todas las mochilas te permiten colocar al bebé en todas las posiciones.
De este modo es posible que encontremos modelos de mochilas portabebés que se pueden llevar en la espalda o en el pecho, mientras que otras no, pero por lo general, los niños muy pequeños se colocan al frente, para tenerlos más bajo control. Los niños mayores, en cambio, también se pueden colocar en la espalda. Y si el asiento es lo suficientemente alto, los niños también tendrán una buena vista del entorno que los rodea y podrán curiosear y distraerse.
Ten en cuenta además, que la posición de cara a los padres es preferible si el niño quiere descansar, porque le permitirá apoyarse en el pecho de su madre o padre y dormir cómodamente. Además, tener la cara vuelta hacia los padres hace que el niño se sienta seguro y le permite tener más control.
La posición orientada hacia la calle permite al niño mirar a su alrededor, aprender a reconocer el entorno que lo rodea, familiarizarse con las luces y los colores. Además, en esta posición, el padre también se verá facilitado en los movimientos.
En cualquier caso, asegúrate de que adopte una postura correcta. La correcta es la postura en forma de M, que hace que los hombros, la espalda y las caderas estén alineados y rectos.
La posición frontal se recomienda para bebés que ya tienen más de 5 meses. Para los bebés recién nacidos, sin embargo, se recomienda la posición lateral . Colocado de lado, el bebé puede descansar como en una cuna o puede ser alimentado cómodamente. Esta es la posición ideal para los niños que aún no pueden pararse solos.
Mochila portabebés: consejos para comprar una
Con lo dicho, ya puedes comenzar a pensar en el modelo de mochila portabebés que posiblemente sea mejor para ti, pero podemos centrarnos además en otros detalles y características que nos van a servir para escoger la más adecuada. Toma nota entonces, de estos consejos:
Mochila portabebés que sea ergonómica
Una mochila portabebés debe ser ante todo ergonómica. Esto significa que debe realizarse de tal manera que permita al niño asumir todas las posiciones posibles sin dañar su espalda, hombros o caderas.
Un portabebés se puede utilizar desde el nacimiento. Pero, especialmente en los primeros meses de vida, los huesos de los niños son más frágiles, deben tener tiempo para formarse y fortalecerse. Por ello es necesario que la mochila portabebé sea cómoda, resistente y equipada con todo lo que garantice estabilidad y seguridad. Asegúrate de que haya también un reposacabezas y que el acolchado sea adecuado.
Además, para acomodar al bebé en cualquier posición, el asiento del portabebé debe ser lo suficientemente ancho. No demasiado para evitar que el bebé se resbale, pero sí lo suficiente para evitar que se mueva.
Peso
¿Hasta cuando puedo usar la mochila portabebés? ¿Cuál es el peso máximo soportado? Estas son preguntas frecuentes. El portabebés es un accesorio que perdura en el tiempo, no existe un límite máximo real, sino que en realidad es el límite de peso el que marcará que podamos seguir usándola o no. Cada mochila portabebés tiene su propia estructura. Por este motivo, en cada producto se indica el peso máximo que puede soportar con seguridad. Simplemente verifica los detalles técnicos de cada modelo para encontrar el adecuado para su hijo.
Materiales
El material más adecuado para una mochila portabebés es definitivamente el algodón, en lo que al forro exterior se refiere, un buen portabebés debe estar fabricado con material hipoalergénico , que no irrite ni enrojezca la delicada piel del bebé. Pero también debe ser transpirable , para evitar que no solo el bebé sude excesivamente, sino también el portador.
Practicidad de uso
Una mochila portabebés sirve para permitir que el usuario se mueva libremente mientras permanece en contacto con el bebé. Por esta razón, debe ser práctica. Un portabebés práctico no solo tiene que ser fácil de poner. Sobre todo, debe ser cómodo y ofrecer la posibilidad de poder llevarlo durante muchas horas. Por esta razón, será bueno asegurarse de que tu mochila porta bebé tenga correas ajustables . De esta forma, podrás ajustar el largo de los tirantes según la posición del niño y tu comodidad, hasta alcanzar la máxima comodidad.
Pero una buena mochila portabebés también debe tener tirantes suaves y bastante anchos . De esta forma, será más fácil soportar el peso y moverse sin cansarse.
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- Cuidados del bebé